Camila Sodi comparte cómo superó el duelo por la muerte de su madre

La actriz y modelo publica “El pequeño libro del duelo”, una crónica de su propio andar tras acompañar a su mamá en los últimos días de su vida, con el que quiere ayudar a otros a transitar el dolor.
“Creo que me va a dar un infarto, llévame al hospital”, con esta frase inició el camino de Camila Sodi acompañando a su madre Ernestina en sus últimos días de vida. A un año de su muerte, la actriz dice que “el inicio del duelo es como ser lanzado al agua sin saber nadar”.
“Transmutar el dolor en arte ha sido parte de la humanidad desde que la humanidad se llama así. Nuestros museos están llenos de eso, toda la música que escuchamos está llena de eso.No soy la excepción, creo que algunos transformamos la catarsis en algo creativio”, dice en entrevista la actriz y modelo, rodeada de las imágenes divinas de la capilla gótica del Instituto Cultural Helénico, y de caminos de cempasúchil.
El motivo de la conversación es el inicio de una nueva faceta en su carrera, como escritora, con el lanzamiento de “El pequeño libro del duelo”.
Se trata de la crónica de su propio andar tras la muerte de su madre, la historiadora del arte, periodista y también modelo Ernestina Sodi, sucedida en noviembre de 2024. Un libro íntimo que decanta en un ensayo sobre la pérdida y el desconsuelo.
En la publicación, Sodi comparte detalles personales de la vida de su madre, como sus dos matrimonios fallidos con hombres abusadores física y emocionalmente. Repasa los pasajes más dolorosos de su vida como cuando fue golpeada el día de su primer boda, el desfalco que le hizo su segundo marido y el secuestro que sufrió.
Camila Sodi explica que no se trata de un texto de orden lineal o específico, “porque cuando tocas la trascendencia, el tiempo y el orden pierden valor, no existen”. Así es como el libro trata temas como el precio del amor, el destino, la afronta con la muerte, el desapego, la intuición, la culpa o la consolación.
“Es un ensayo sobre el duelo y la excusa es la muerte de mi madre. A través de esta narrativa he encontrado las herramientas que a mí me ayudaron a transitar lo más profundo y espeso del duelo. Este libro se convierte en una especie de herramienta para mí, para ti y para quien lo lea”, explica.
“Siento que, como seres humanos, lo mínimo que podemos hacer por el otro es compartirle nuestra historia. Estamos hechos de compartirnos historias, para sanarnos y darnos la mano en esta hermandad perdida de la que hablo en el libro. Mi duelo por escrito comienza por ser una autoconsolación que luego se transforma para ponerme al servicio de los demás, porque todos los seres humanos hemos amado”, agrega.




